Estas son las realidades del siglo XXI, el dosímetro se convierte en un atributo de la vida cotidiana, como un televisor, una computadora o un teléfono. El mercado se actualiza diariamente con nuevos modelos. Sin embargo, el costo no siempre coincide con la calidad. El principal indicador al que se debe prestar atención al elegir un dispositivo de monitoreo de radiación es la precisión de las mediciones.

El objetivo principal de los dosímetros es detectar y controlar la radiación γ (X). Al mismo tiempo, la detección oportuna de nucleidos activos beta- (β-) y alfa- (α-) en el aire, el suelo, el agua, los alimentos y los objetos ambientales también puede salvar a miles de personas de la exposición y la muerte prematura.

Estas tareas se realizan mediante dispositivos denominados “dosímetros-radiómetros”.

Los dosímetros-radiómetros se dividen en domésticos y profesionales.

La desviación de las lecturas del electrodoméstico de los valores reales puede variar tanto en la dirección mayor como en la menor. Las lecturas incorrectas pueden ocultar un peligro obvio o asustar al usuario si no existe ninguna amenaza. Este hecho convence a muchos de comprar un dispositivo profesional, incluso para las tareas del hogar.

Solo un dispositivo profesional garantiza la precisión de las lecturas. Cada dispositivo es verificado por fuentes de radiación de referencia para verificar el cumplimiento del error declarado en todo el rango de medición. Los controles de calidad se llevan a cabo en centros metrológicos especiales acreditados.

Además, los más convenientes para los usuarios son los dosímetros-radiómetros profesionales que tienen un tiempo de medición corto y una respuesta rápida (cambio de lecturas) cuando cambia la intensidad de la radiación.